Parque de rosas

¡¡Hola a todos!!

Me alegró la acogida que ha tenido la última entrada y me ha encantado leer las opiniones de todas las que participasteis. Ayer estuve ocupada, así que hoy en cuanto pueda me paso por los blogs de nuevo.

Novio siempre me ''regaña'' porque cojo toda la publicidad que me dan por la calle, si son pañuelos está bien porque nos los quedamos, deberíais de ver la cantidad de pañuelos que me he traído de allí, adjunto esa actualización a la del rizador de pestañas, pero otras veces cojo cualquier propaganda.
Yo siempre le digo que es que me da pena, pena porque es un trabajo que perfectamente podría hacer yo y no me gustaría que pasase nadie de largo, es sólo coger un papel, ya lo tirarás en tu casa.

cuando cogí esto se rió un poco por lo bajo seguramente pensando que no tenía remedio, pero es que esta propaganda era de un local en el que comimos el último día okonomiyaki, al pagar vi que había varios dibujos de gatos y pensé que me gustaría tener uno. A la salida había como un buzón y que había unos promocionando el restaurante supongo y me cogí uno.

Me hace gracia el mapa que traen siempre para que puedas llegar hasta el local, que a mí me parece siempre un laberinto, yo no entiendo mapas.

 

El restaurante estaba en la zona de Namba, al lado del puesto de tartas de queso, subiendo por unas escaleras empinadas, yo no sé cómo siempre encuentran los locales por más escondidos que estén porque muchas veces hay que subir o bajar escaleras.

Para el último día dejo siempre alguna compra que quiera hacer, así que después de eso nos movimos cerca de Umeda donde había unos jardines de rosas que en primavera deben de ser preciosos y donde yo conseguí varias picaduras de mosquito, es lo que tiene no acordarse de usar el repelente que llevaba él.

Novio hizo unas fotos fantásticas, yo soy más de tiro fácil, así que le pedí que sacase él algunas fotos porque me gustaría enseñarlas en el blog y se tomó muy en serio la tarea.

Por esta zona y a lo lejos pudimos ver una noria en la que nos habíamos montado él y yo varios días antes y que ya enseñaré en otra entrada.

Mirase donde mirase las vistan eran PRECIOSAS, todo iluminado y reflejado en el agua, además de que ese día hacía muy buena temperatura, lo único por lo que se veía empañado era que sabíamos que era la última noche. En la foto podéis apreciar dos de mis picaduras (llevava entre 6 y 8 XD)
En el parque había mucha gente haciendo deporte, paseando, leyendo o hasta tocando un ukelele, era genial el ambiente.

Para cenar fuimos a un restaurante chino de un conocido de Novio que había por allí cerca, donde entre varios platos (me faltó uno por hacer foto) había mabodofu ¡sí, mi plato favorito!
Eran enooormes los platos, no pudimos terminarnos el del arroz...

Sin embargo el local estaba a rebosar, los salaryman habían salido del trabajo y por lo visto aquel lugar les gustaba para beber y cenar, así que Novio no pudo charlar con el cocinero y él sólo pudo verme un poco porque teníamos que irnos, había cosas que hacer aún en casa y madrugábamos muchísimo.

Para mí fue un día genial con él y qué mejor que tener unas preciosas vistas grabadas en la retina para despedirnos, a pesar de que se notaba un poco la tristeza. ¡Un día genial!

¡¡Nos vemos!!